Office 2007, contratos victorianos y ciudades Linux
Tres noticias:
Office 2007 cambia radicalmente el interfaz de usuario.Caduca el contrato con Microsoft del Gobierno del Estado de Victoria, en Australia.Kwangju se convertirá en la "Ciudad Linux"Para los que no tengan tiempo o ganas de seguir los enlaces, os pongo en antecedentes.
El Ministerio de Información y Comunicaciones de Corea del Sur tiene previsto gastar sólo un millón de dólares (menos de un millón de euros) para que el ayuntamiento de Kwangju se convierta en usuario exclusivo de software libre. Si todo va bien, la experiencia se podrá replicar en otras regiones.
Por el contrario, el Estado de Victoria se ha gastado desde el 2002 casi 50 millones de euros en licencias de productos Windows (Office fundamentalmente). El contrato acaba ahora, así que tienen que decidir si siguen gastando ese dinero, o buscan una alternativa.
Podrían usar, por ejemplo, OpenOffice. Es posible que requiera un esfuerzo para adaptar a los empleados a las diferencias con el paquete ofimático de Microsoft. Pero será un esfuerzo
menor que el que debe hacer para adaptarles a la nueva versión de Office. Y en cualquier caso, ya nunca más tendrá que pagar licencias.
Tendrá disponibles esos 50 millones de euros para otras cosas. Y con 50 millones de euros se pueden comprar, por ejemplo, 35 misiles Standard SM-2 III. O 250 camas de hospital, si es que son más necesarias que los misiles. En cualquier caso, siempre será mejor que pagar esos 50 millones por un papel que dice: "Puede usted usar mi software en sus 40.000 ordenadores. Pero sólo con las condiciones que yo impongo. Y sólo en esos 40.000, que si amplía su parque informático volveremos a hablar. Ah, por cierto, le prohíbo que haga ingeniería inversa de mi producto, incluso aunque sólo quiera recuperar el contenido de su trabajo para exportarlo a otro formato."
Para complicar aún más la cosa para la compañía de Redmond, cada vez más Administraciones empiezan a plantearse la necesidad de
disponer de la información en formatos abiertos, de manera que sea posible transferirla a otros formatos o soportes. Lo de obligar al ciudadano a adquirir un producto de una compañía privada para comunicarse con ellos, siempre les ha dado igual. Al fin y al cabo el coste lo soporta el ciudadano. Pero tener un problema por no poder recuperar un expediente de hace diez años, eso es otra historia.
Microsoft afirma categóricamente que los que invierten 50 millones de euros en su software ahorran dinero con respecto a los que optan por la vía del software libre. Pero me temo que con la que está cayendo van a tener que hacer esfuerzos cada vez mayores para convencer a los gobiernos de que es mejor gastarse 50 millones de dólares en un papelito de licencia que en 35 misiles o en 250 camas de hospital.
Con lo poco que les gusta a los gobiernos que sean otros los que cobren por licencias e impongan condiciones unilaterales, además.